Freja Beha es una de esas modelos que no deja a nadie indiferente. Unos la pueden tachar de sosa, indolente, e incluso rebelde por su actitud y forma de desfilar, pero en mi opinión sabe aportar frescura sobre las pasarelas, cosa que hoy en día es de agradecer.
Otro de los aspectos que llaman la atención en esta modelo danesa son sus rasgos, cláramente marcados, sobre todo en pómulos y mentón, combinados con una mirada fría, hacen que Freja se aleje un poco de los cánones de la belleza clásica.
Freja Beha Erichsen, que es su nombre completo, tiene tan sólo 23 años y se puede decir que ha cogido el testigo de la gran supermodelo danesa Helena Christensen.
Una de las grandes pasiones de Freja es la música rock. No en vano, desde pequeñita su máxima ilusión era ser cantante de un grupo de rock. Con la llegada de la adolescencia se dió cuenta que su voz no era todo lo adecuada para adentrarse en el terreno musical, así que en el 2004 y con tan sólo 16 añitos, prueba suerte en el mundo de la moda ingresando en la agencia danesa Unique.
En apenas un año, su trabajo en esa agencia y sin duda, su estilo y peculiares rasgos no pasaron inadvertidos a ojeadores de la prestigiosa agencia IMG que vieron en Freja una modelo con futuro. Tan convencidos estaban que en febrero del 2005 y con 17 años, sin apenas formación en pasarela, le llegaría su gran oportunidad desfilando en París y Milán para Prada, Cavalli, Louis Vuitton, Cacharel y Chanel entre otros.
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